Finding God in the Literature

Encontrando a Dios en el Programa

Cuando me uní a SA en el otoño de 2020, estaba rota pero dispuesta a seguir indicaciones. Eso fue porque estaba desesperada. Aunque muchos años de experiencia en AA me dieron algunas ventajas, como innumerables reuniones de estudio de libros y un buen conocimiento del Libro Grande y de los Doce y Doce, incluso recordaba algunos pasajes, como la página 417 sobre la aceptación, que aún podía recitar de memoria. Lo que memorizaba seguía siendo una especie de biblioteca mental de referencia.

Sin embargo, todo ese conocimiento no me sirvió de nada para lograr la sobriedad sexual, hasta que alguien me sugirió SA, a lo cual me rendí desesperadamente.

De inmediato comencé a buscar una madrina en SA y asistía a reuniones diariamente. También me sumergí en la literatura, como había hecho en AA. Subrayaba los pasajes más impactantes con bolígrafos de colores, lo que convirtió cada libro en un cuaderno de trabajo personal. Cuando mi parte sexolica hace lo suyo y me atormenta, ahora tengo otra biblioteca de referencia personal al alcance. Mi Libro Blanco está tan subrayado, resaltado y anotado que en algunos lugares es casi ilegible. Todas las oraciones están anotadas en los márgenes, y las esquinas de las páginas están dobladas. Hubo un tiempo en que repasaba cada una de esas esquinas dobladas y rezaba todas las oraciones en mi tiempo de silencio.

Fui bendecida con una madrina que me enseñó a leer un pasaje cada día, escribir mis impresiones libremente y enviarle lo que escribía. Trabajamos juntas de esa manera a través de gran parte del Libro Grande, el Libro Blanco y los Doce y Doce. Siempre estaré agradecida con ella por mostrarme cómo vivir con esa base firme para mi recuperación. Ella me enseñó que “cuando tengo problemas, la literatura tiene soluciones”. Esto encajó bien con mi visión de la literatura del Programa como mi biblioteca de referencia personal. Recuerdo esa época con mi primera madrina con cariño.

Ahora estoy rehaciendo los Pasos con una nueva madrina, y ella me está guiando a través del libro de SA PASOS EN ACCION. Para cada Paso, sugiere varios pasajes para estudiar en otros libros. Este es un enfoque más lento para trabajar los Pasos, pero está fundamentando otra base sólida para mi recuperación.

Aunque ya me había liberado de la mayoría de las redes sociales y dispositivos tecnológicos, un mentor me sugirió que descargara una aplicación de chat que muchos miembros de SA en el Reino Unido utilizan comúnmente. No tenía idea de que existieran estas cosas. Luego, como el mundo estaba en confinamiento cuando me uní a SA en 2020, abracé las reuniones en línea y establecí contactos por todo el mundo. Entusiastamente me lancé a toda la conexión tecnológica que pude encontrar. Tomé en serio que “El sexolico desconectado es una desconexión que está por suceder” (SA 34). Llegué a entender que “desconectado” se refiere más a estar desconectado de Dios que de los compañeros. Esta fue una realización muy significativa para mí.

Diría que el núcleo de mi éxito en la recuperación es apoyarme fuertemente en la literatura del Programa. Me ha ayudado a entender y lidiar con mi adicta interior. Crezco en mi programa personal gracias a la literatura, y me ayuda a crecer en todos los aspectos de la vida cuando “practico estos principios en todos mis asuntos” (SA 143). Mi principal fuente de consumo de conocimiento era el medio digital, con su constante bombardeo de fragmentos de información cuestionable. No solo me robaba horas cada día, sino que se convirtió en el lente a través del cual veía mi vida. Al reemplazar ese lente digital, a través del cual enfocaba la mayor parte de mi tiempo y pensamiento, por el nuevo lente de la literatura aprobada de SA, encuentro que la vida es mucho más digna de ser vivida. Agradezco a mis madrinas por este gran cambio de perspectiva mientras trato de transmitir mi amor por la literatura a mis ahijadas.

Sufro de dolor crónico y un trastorno del sueño, por lo que con frecuencia estoy despierta durante largas horas de la noche. Me encanta el silencio, me encanta leer la literatura y registrar mis pensamientos e impresiones en cuadernos de estudio durante esas horas tranquilas, cuando puedo escuchar la influencia de mi Poder Superior un poco más claramente. Puedo adoptar una perspectiva de recuperación con mi dolor y problemas de sueño disfrutando de mi inmersión en la literatura hasta que pueda dormir. Entonces, puedo ver estos problemas médicos como un regalo de mi Poder Superior. Puedo buscar aliento para ser buena conmigo misma y aprovechar la experiencia, fortaleza y esperanza de aquellos que me han precedido y la han plasmado en la escritura.

Creo firmemente que cuando estudio la literatura de recuperación y escribo, mi Poder Superior se comunica conmigo. Es mi forma de meditación. Cuando hago esto, tengo un buen día. Cuando no lo hago, no lo tengo (ni tampoco las personas con las que entro en contacto). Realmente es así de simple para mi.

Cuando escribo, descubro de nuevo lo que realmente cree mi corazón. Y cuando el ESSAY publica algo, puedo transmitir mi experiencia para que pueda ayudar a alguien más. Veo el ESSAY como un sexolico hablándole a otro, una verdadera “reunión impresa” (Manual de Servicio de SA, cap. 15, p. 1).

Nuestra literatura del programa es la razón por la que sigo viva hoy: ¡feliz, alegre y libre! Nunca podré estar lo suficientemente agradecida.

Kathie S., Devon, Reino Unido

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